lunes, 13 de mayo de 2013

Fátima, la vida siempre nos guarda sorpresas..

La vida siempre nos guarda sorpresas..

De esos días en que Fátima se sentía peor que nunca, sólo pensaba en quedarse en casa, ponerse pijama y si sus hijas no salían se acurrucaría con ellas a ver alguna buena película. Pero el destino nos tiene las cartas marcadas, y Fátima hoy no escaparía del él.

Cuándo se doblaba en su sillón favorito y tomaba el control para buscar algo que ver en la televisión sonó su celular, era Perla su mejor amiga, la única que conocía su alma casi igual que ella. Perla sabía muy bien que Fátima necesitaba retomar su vida, que ya había pasado el tiempo suficiente en ese estado de depresión y aislamiento en que se dejó caer tras la muerte de Alberto. Ella entendía muy bien a Fátima pues veinte años de matrimonio más otros tantos de noviazgo formaban una larga vida y por eso su amiga no encontraba de nuevo el camino para seguir adelante. Pero han pasado dos años, dos años en los cuáles la vida de Fátima ha girado alrededor de sus hijas, el negocio que Alberto le dejó y su casa. Y no era justo que una mujer tan joven se marchitará de esa manera, además Perla sabía muy bien que apesar de que Fátima se casó muy enamorada, Alberto cambió mucho enseguida que se casaron. Nadie puede decir que su amiga fue la mujer más feliz del mundo a lado de él, y también estaba consciente de que ese amor tan grande que Fátima sintió por él, con los años se fue desvanenciendo hasta quedar sólo cenizas, cenizas que se convirtieron en cariño pero más que nada en costumbre, miedo y  hasta rencor. Un rencor que quemaba a su querida Fátima, pues ella conocía bien a su amiga y sabía que sufría mucho porque tenía un gran corazón y odiaba sentir esos sentimientos negativos por Alberto. ¿Que pasó? que él siempre fue un hombre inseguro y lleno de complejos que dedicó su vida a humillarla para sentirse de esa manera más hombre y ocultar sus complejos. En fin, eso es pasado, y Fátima lo perdonó pues al final el se arrepintió y quiso enmendar cuándo ella trato de dejarlo, desesperada ya por la situación. Aunque en el fondo ella sabe muy bien que Fátima nunca habría tenido el valor pues la unían tantas cosas a él y no supo encontrar el modo, no imaginaba como haría una nueva vida y sus hijas pesaban sobre ella demasiado pues siempre han sido su tesoro más amado. Así que decidió que hoy era el día perfecto para sacar a Fátima de ese estado de depresión y recordarle que afuera hay un mundo maravilloso, un mundo para Fátima la mujer, no la madre ni la viuda. Hoy saldrá Fátima Velez a recuperar su vida y de aquí en adelante ella estaba segura que no dejaría a su amiga mirar hacia atrás, sólo para adelante.

Fátima en un principio no quería aceptar la invitación, pero Perla insistió tanto. Y sus hijas también le pidieron que fuera, ellas ya querían ver a su madre sonreír. Siempre le habían dicho que es muy bonita pero ella no les creía pues jamás Alberto se lo dijo, bueno de novios si lo hacía. Alberto!, no ella ya lo había perdonado y se había prometido no recordar nunca con desprecio las cosas que le hizo, sólo recordaría por su propio bien los buenos momentos. En fin ante tal trío de cómplices coludidas para que ella saliera, aceptó. Se dió un baño para despejarse, sus hijas eligieron su atuendo, nada serio ni triste, alegre mamá le dijeron. Bueno, un pantalón negro de corte recto pero ajustado a la silueta y una blusa verde esmeralda que sí, es verdad le sentaba bien, zapatillas, unos lindos aretes y maquillaje, hacia tanto que se maquillaba tan poco que pensó que no sabría como hacerlo pero como siempre le ha dicho July la más pequeña de sus hijas que ella se maquillaba muy bonito, decidió aplicar la misma técnica de toda la vida en sus ojos grandes, expresivos pero tristes. había que darles luz y punto.

Cuándo estuvo lista recibió aplausos y piropos de sus hijas, eso la animó y les regalo una sonrisa que ellas gozaron, ve y diviertete mamá, le dijeron las dos, tía Perla ya te espera, cena rico y disfruta la platica.

No sabía a donde la llevaba Perla, sólo le había dicho ponte más hermosa de lo que ya eres porque hoy tu vida va a cambiar. Según Perla tenía la corazonada de que hoy mi vida iniciaría de nuevo.

 Aja!! lo sabía que estarías espectacular, mmm ya me esta dando envidia creo que nadie me mirará por verte a ti, dijo Perla al verme, Ella es mi hermana más que amiga, la amo, sin ella no sé que habría sido de mí todo este tiempo. Y tiene el mejor sentido del humor, logró que yo soltará tremenda carcajada con su comentario,  pues ella se veía regia también, sus ojos verde claro son hermosos y se había puesto un vestido naranja que le quedaba lindo. Vamos pues, le dije, antes de que me arrepienta, si ya lograste esto, llévame entonces a un lugar lindo, creo que tienes razón y ya es mi momento de volar por mi y para mí.

Fuimos a un restaurante que estaba de moda, relativamente nuevo, decorado al estilo minimalista en contraste con el ambiente de música en vivo y aire de bohemia resultaba un mezcla muy llamativa. Vino, una tabla de quesos y carnes frías fue nuestra elección. Perla también había invitado a algunas amigas en común, de la época de la preparatoria con las que solíamos reunirnos antes de yo que enviudará y me encerrará. Hacia mucho no las veía y realmente sentí mucho gusto de poder saludarlas, y debo reconocer que todas estuvieron presentes cuando Alberto falleció, hasta me buscaron durante un tiempo para animarme y siempre me demostraron cariño, así que no podía Perla haber tenido mejor idea que reunirlas, al final supe que todo estaba planeado y que estaban ahí todas en mi honor, porque me querían y deseaban verme ya recuperada.

Fátima sonreía, conversaba con sus amigas, tomaba de su copa y estaba realmente disfrutando el momento como hacía muchos años no lo hacía, Ni ella misma estaba consciente del cambio en su rostro, de la trancisión que en ese momento se estaba dando en su corazón. Entre platicas y risas, y de manera casi espóntanea Fátima iniciaba el final de un duelo que realmente había empezado muchos años antes de la muerte de su esposo. Un duelo que mantenía su corazón latiendo pero sin emitir luz ni energía en su alma, un duelo que la hundió durante tantos años en la más triste soledad a pesar de tener a su alrededor tanta que gente que la amaba como sus hijas y estas amigas que hoy le tendían una mano y la sacaban a la superficie.

Y como la vida nunca desperdicia los momentos en que emitimos luz, muy cerca de su mesa se encontraba la nueva puerta que se abriría para Fátima y le brindaría el más bello amor de su vida.

Cómo toda mujer a pesar de los años dormidos, la intuición de Fátima aún vivía dentro de ella, así que no tardo en darse cuenta de la constante mirada  de un hombre que igual que ella convivía con un grupo de amigos, desde su mesa situada no muy lejos de la de ella, él la miraba insistentemente, lo miró discretamente pues no quería que se diera cuenta, lo que menos deseaba era coquetear con él, sólo tenía curiosidad de verlo pues la vanidad en el fondo como a todas las mujeres le ganaba la partida. Pero el destino marcó su vida en ese momento, pues a pesar de su intento de discreción no pudo evitar que sus miradas se cruzarán. Por unos cuántos segundos se miraron, pero no supo que hacer, se sintió muy apenada y enseguida desvió la mirada hacía sus amigas, tratando de recuperar la conversación con ellas, sin lograrlo pues en su mente se repetía la escena anterior, aquellos segundos que fueron suficientes para que le quedará grabada la mirada de aquel hombre. Un hombre que no podía negar era atractivo, varonil, de mirada intensa y ojos profundos. Además no entendía todavía porque pero no le había molestado que la mirará, ¿qué extraño? pensaba, ¿porque le tomó importancia?, ¿porque lo miré?.  Se sintió confundida porque lo que menos se imaginó cuándo acepto salir fue que le pasará esto, no ella no buscaba una pareja. De pronto se sintió tan tonta, estaba llevando su imaginación demasiado lejos analizando de tal forma la mirada de aquel hombre, cuándo para él seguramente sólo había sido un acto más de coquetería masculina, una miradas sin el más mínimo sentido que admirarla, pues quizás ella le había parecido guapa, pero nada más. Se enojó con ella misma por   ser tan poco inteligente. Decidió despejar sus pensamientos y continuar la velada con sus amigas, aunque en contra de ella misma, su corazón latía porque él si sabía que aquel hombre era él que había esperado toda la vida.

Notó que él no dejaba de mirarla, pero se cuido muy bien de no volver a caer en su juego, porque decidió pensar que aquello sólo era un juego para ese hombre. Y punto, tema finalizado se dijo para sí misma, es más a nadie se lo platicaría, ni a Perla.

Cuándo salían del restaurante, se dio cuenta que él la siguió con la mirada pero prefirió ignorarlo, nunca lo volvería a ver. Al día siguiente volvería a su rutina y se olvidaría de esas tonterías de miradas.

Pero al contrario de los planes de Fátima, la vida ya había decidido que el amor verdadero debía entrar por fin en su corazón. Por eso a pesar de que pasaron los días ella seguía pensando en él. Su mirada profunda y clara estaba clavada en su mente. Y poco a poco fue suavizando la idea, y comprendiendo que había algo en él que le inspiraba confianza, entendió al fin que su reacción de aquella noche fue producto del miedo, un miedo aterrador de entregar de nuevo su corazón y de la inseguridad que la vida con Alberto había dejado en ella.

A las pocas semanas Perla y sus amigas la invitaron de nuevo a salir, enseguida aceptó y hasta fantaseó con ir al mismo lugar, pues quizás él estuviera de nuevo ahí, y verlo sería agradable. Pero no, esta noche eligieron  ir al teatro, y no tuvo más remedio que aceptar que el destino no quería darle la oportunidad de verlo de nuevo.

La obra estuvo estupenda, una comedia de esas en las que no puedes para de reír. Se divirtió tanto que hasta olvido al hombre que durante varias semanas le había robado sus pensamientos. Pero las sorpresas de la vida llegan cuándo menos te lo esperas. Así que de repente, al terminar la obra  cuándo se prenden las luces y todos se levantan para aplaudir a los artistas, en el momento en que ella se da la vuelta para tomar su bolso que había puesto en el asiento, es entonces que sus miradas se encuentraron de nuevo, y ella sólo pudo pensar, es él,  ¿cómo podía ser tal concidencia?.  Había estado todo este tiempo sentado exactamente atrás de ella. Ninguno de los dos pudo evitarlo, se miraron de frente y tan cerca que sus ojos se unieron en una sola mirada, le devolvió la sonrisa que él le ofrecía, una sonrisa en la que no podía ocultar la emoción que sentía de verla. "Hola, pensé que nunca volvería a verte", fueron las primeras palabras que él le dijo, enseguida se presentó y ella hizo lo mismo, se llamaba Daniel Díaz Lara. Vaya hombre aquel, sin perder un minuto le suplicó le diera su numero de celular pues aquella coincidencia no sabía si volviera a repetirse, Fátima ya no lo pensó dos veces, le dió su número y aceptó que debía iniciar un nuevo vuelo, la vida le sonreía y ella le devolvería la sonrisa.

Era el mes de abril cuándo empezó la amistad con Daniel, una amistad que poco a poco se convirtió en un bello amor. Junto a Daniel descubrió la maravilla de ser mujer, descubrió que podía ser la mujer más sensual del mundo, algo que le resultaba tan nuevo. De la mano de Daniel se adentró en un mundo nuevo, conoció por primera vez la pasión, y el verdadero amor. Su piel se acostumbró enseguida a sus caricias, y su cuerpo a ser amado. Entendió que hacer el amor era ir más allá de las estrellas, que en un orgasmo ella y Daniel podían fundir sus almas, y traspasar vidas, mundos y sentir el paraíso.

Han pasado cuatro años desde que Fátima conoció a Daniel, y junto a él también conoció a Fátima, la mujer. Con los años ha aprendido que amar es entregar, aceptar y conservar la esencia propia intacta. Que cuándo se ama no se debe perder uno mismo dentro de ese amor porque entonces deja de ser amor y se convierte en dependencia y control.

Fátima superó sus miedos, recuperó su autoestima, y supo enfrentar a sus hijas para luchar por el amor de Daniel, al principio no fue fácil, hubieron piedras en el camino pero cuándo un amor es así de fuerte y viene de otros tiempos, de vidas anteriores como una persona le aseguró un día a Fátima,  se logra ganar las batallas y siempre triunfa el verdadero amor.

Ellos ya se amaban, através de sus almas pero sólo la vida sabe cuándo es el momento para que se encuentren. Y siempre ese será el momento correcto. Pues para el amor nunca es tarde. A veces sólo se da en un momento díficil pero si saben esperar y mantenerse unidos, un gran amor siempre persiste sin que nada lo detenga.

Felicidades a Fátima y también a Daniel por demostrar que era un hombre que valía la pena.

Eva.. en honor a Fátima..









13 comentarios:

  1. y la importancia de la amiga incondicional que está para ti siempre. javascript:void(0)

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  2. lo escribiste te lo env iaron , muy buena historia

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  3. No siempre se debe de pensar que ya no hay segundas oportunidades y más cuando se trata de revivir el amor y la pasión, afortunada Fátima.

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    1. Gracias amiga.. Así es la vida premio a Fátima por su gran corazón, y la recompensó con Daniel, el verdadero amor.

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  4. Bonita historia donde transportas a la escena como lo cuentas, que bueno por Fátima que encontró el amor después de un doloroso tropiezo, siempre hay algo reservado para uno.

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  5. Siempre hay alguna fátima, alguna Eva.
    Somos ante todo mujer... y muchas veces nos olvidamos de que lo somos.. Abrir nuestro interior, nuestro corazón de nuevo al amor.

    terecasacor@hotmail.com

    Tere Santiago Córdova

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    1. Gracias Tere, muy lindas tus palabras... Me enorgullece que te guste el concepto y lo captes así tal como yo deseo que todas lo vean.. Todas somos Eva.. y muchas Fátimas que van por la vida por supuesto..Como también hay muchas Iris y las que se me ocurran siempre inspiradas en los misterios y las situaciones a las que nos enfrentamos día a día las mujeres.

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  6. Ely, ya parece que puedo comentar! me encantan tus hostorias, Fatima hizo bien a aprovechar su segunda ocasión! la vida va vivida hasta el final! Saluti Sol

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  7. claro, tus Historias queria decir!.

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  8. Ay no se pero m dejas picada como que falta mas porque se me hizo corto felicidades

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    1. Corta pero profunda.. que bueno que te quedaste picada.. eso quiere decir que te gusto.. gracias mami besos

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